miércoles, 21 de septiembre de 2011

... Miedo a la tristeza, tristeza por tener miedo... ¿ tu que harias?


Cinco minutos antes de despertar la realidad, te vi parada esperando en los columpios del parque, Llevabas ese vestido rosa con florecillas azules, entonces aun tengo un maldito secreto que se come lentamente mis manos y que cuando estoy contigo se encuentra colgando en la punta de mi lengua torturando mi forma de hablar, creo que no lo sabes, pero aun así es un secreto que quiero guardar, aunque cada noche estas palabras destrocen frenéticamente mis huesos, entonces ¿lo sabes?  No lo sé; diario me pongo una máscara alegre de lado a lado que se empeña en hacerte o hacerme ver bien pero la verdad es que quiero decirte un secreto, antes de que el cielo se ponga rojo, y el sol escape de nuestras miradas, mucho antes de que el cielo explote en negro y un puñado de estrellas caigan sobre nosotros, antes de que te encuentres en el mismo lugar que yo cuando nuestra mirada escapa de nuestras pupilas sobre la cama cada noche de nuestra larga o ¿corta? Vida... pero las horas se vuelven segundos y entonces no tengo un motivo para estar orgulloso de mí, porque tal vez tengo un secreto que nunca sabrás, o tal vez sabes pero eso ya no lo sabré yo porque me encuentro sumergido en mis pensamientos... espero que no... Solo quiero decírtelo antes de que mis propias palabras me estrangulen...